INFORME DE IMPACTO AMBIENTAL
La pista de Alvedro se ampliará hacia Culleredo y obligará a demoler 46 viviendas unifamiliares
La ampliación de la pista del aeropuerto coruñés de Alvedro tendrá algunos impactos importantes en el entorno en el que se ubica. Según el Estudio de Impacto Ambiental que hoy se ha puesto a disposición pública, ampliar en 400 metros la pista por la cabecera 04, opuesta a la Ría de O Burgo, obligará a expropiar 20 hectáreas de terreno circundante repartido en 250 parcelas, en el que se conjugan usos agrarios y residenciales.
El documento refleja que se verán afectadas 46 viviendas unifamiliares, que deberán ser demolidas. También desaparecerá la fábrica de Grafoplás, una escuela infantil y una carpintería ubicadas en la zona. Unas afectaciones que el informe considera como un “impacto severo”. Además la ampliación obligará a modificar y desviar las carreteras comarcales CP-3104 y CP-3006, además de afectar a líneas de alta y media tensión, así como a la red de abastecimiento de aguas y a algunos puntos del saneamiento y alumbrado del municipio de Culleredo.
La modificación y los trabajos también afectarán al patrimonio cultural de este ayuntamiento. El documento recoge la “afectación directa” del Pazo de Culleredo, que según el informe deberá ser demolido o trasladado, lo mismo que el cruceiro que se ubica en las cercanías la Iglesia de San Estebo. Este templo, catalogado como elemento de protección integral, también sufrirá los trabajos con una “disminución de su calidad ambiental”. El estudio de impacto también prevé que, antes de iniciarse las obras, se realice en la zona una prospección arqueológica, para descartar que se ubique en ella un sepulcro romano catalogado en el PGOU cullerdense, cuya ubicación exacta se desconoce.
El informe hecho público por el Ministerio de Fomento también reconoce que el proyecto supondrá un impacto visual “severo”, ya que para ampliar la pista actual de 1.940 metros hasta los 2.340 previstos será necesario construir un talud de 35 metros de altura que modificará el relieve actual de la zona y supondrá una “fuerte intrusión visual en el paisaje”.
Por otro lado, las labores de desbroce afectarán a una superficie de 445.432 metros cuadrados, y las actuaciones de ampliación conllevarán la desaparición de 37.873 metros cuadrados de vegetación densa. Para paliar los distintos impactos que originarán las obras, el estudio prevé una serie de medidas protectoras y correctoras cuya presupuesto supera los 5 millones de euros.
LA ALTERNATIVA MENOS COMPLICADA
El informe de AENA se decanta por ampliar la pista por la cabecera 04, en lugar de hacerlo por la 22, la orientada hacia la Ría de O Burgo, ya que según se explica, esta segunda opción afectaría a la autopista AP-9 y al sistema ILS CAT II/III recientemente instalado.
Aunque esta alternativa sólo supondría expropiar 7’7 hectáreas de terreno (menos de la mitad que en la cabecera 04) y la demolición de 29 viviendas, el estudio de impacto ambiental establece que la “afección de infraestructuras” sería “mayor” y de “gestión más compleja” y que provocaría más “afección acústica” a los núcleos de población próximos.
PREVÉ UN AUMENTO DEL 35% EN EL TRÁFICO DE PASAJEROS
El informe de AENA recuerda que la ampliación de la pista en 400 metros ya fue recomendada en el Plan Director de Alvedro firmado el 31 de julio de 2001 y señala que la situación actual de las instalaciones y las previsiones de demanda futura recomiendan la mejora.
El documento prevé que para 2014, fecha de entrada en funcionamiento del nuevo tramo de pista, el aeropuerto coruñés aumente en un 35% el número de pasajeros, llegando a los 1.714.800. También calcula que en 2020 se habrán superado los 2 millones de viajeros.
La ampliación deberá mejorar la operatividad del aeródromo, permitiendo que pueda operar por única cabecera, en lugar de trabajar como hasta ahora con “operaciones enfrentadas”, es decir, efectuando los despegues por la cabecera 04 y las llegadas por la 22.
En definitiva, se prevé que al aumentar el recorrido de la pista se den mejores condiciones de aterrizaje y despegue, pudiendo dar servicio a aeronaves más grandes y mejorando la seguridad de las instalaciones. Según se recoge en el Estudio de Impacto Ambiental, el presupuesto de las obras de ampliación es de 72.227.838 euros.