Reduce el estrés para cuidar tu piel
La piel suele ser uno de los primeros lugares en los que
aparecen las consecuencias del estrés. Desde pequeños enrojecimientos, hasta la
aparición de problemas más graves como la psoriasis, una piel enferma no solo nos
afecta estéticamente, sino que también hace que vivamos mucho más incómodos y
preocupados.
Actualmente, vivimos en un mundo en el que todo se necesita
para ayer, la competitividad en el trabajo es enorme y la presión social sobre
lo que debes y no debes hacer se mantiene al máximo nivel. Ante esta situación,
saber tomarse un tiempo para uno mismo y relajarse es esencial. A continuación,
te ofrecemos algunos consejos para que reduzcas tus niveles de estrés y mejores
el estado de tu piel de forma natural.
1.- Date un buen masaje con una crema hidratante
La ducha debe ser un momento de relajación y te puedes dar
un buen automasaje mientras te aplicas tu crema hidratante para culminar este
momento. Ponte una música que te guste y, aunque no hace falta que sea música
clásica, que te ayude a relajarte. Aplícate la crema con cuidado en cada zona y
centrándote en lo que estás haciendo. De esta forma te olvidarás de las otras
muchas cosas que tienes que hacer durante un rato.
2.- Si te bañas, no te pases con el agua caliente
El baño es una forma perfecta de relajarse, pero es
importante que no lo hagas en agua muy caliente si lo que quieres es cuidar tu
piel. Un agua templada, pero cómoda, será mucho más beneficiosa.
3.- Haz estiramientos
Los estiramientos son excepcionales para los músculos, la
salud de la espalda y para relajarse. Además, no necesitas largas sesiones de
gimnasio. Simplemente con una estera en el suelo y unos vídeos de YouTube
puedes hacer tus propias sesiones de 10 o 15 minutos obteniendo muy buenos
resultados a largo plazo.
Hazlos poco a poco y sin forzar, al igual que ocurre con el
automasaje del punto uno, la clave del éxito es que te olvides de todo por un
rato y te centres en ti y tu cuerpo.
4.- Ríete
Fácil de decir, pero difícil de hacer. Puedes conseguirlo
quedando con unos amigos, o escuchando tu programa favoritode humor en la radio.
Lo importante es que al reírte mejoras tu salud de una forma agradable y que
tendemos a subestimar.
5.- Antes de dormir, medita un poco
Muchas personas piensan que meditar es no pensar en nada,
pero eso es algo que no está al alcance de todos. Sin embargo, puedes pensar
sobre un lugar agradable en el que hayas estado y convertirlo en tu vía de
escape. Si lo haces en la cama, mientras respiras de forma controlada y te
relajas, verás que te resulta mucho más fácil dormirte.
En resumen, una buena forma de relajarse es aumentar la
conciencia de ti mismo. El estrés suele derivarse de que las situaciones nos
superan, pero nuestro cuerpo es una buena protección
contra ello y está ahí para ayudarnos. Solo necesitas centrarte en él un
poquito.
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